domingo, 13 de marzo de 2011

El otro día, ví una película muy antigua, en blanco y negro, me llaman la atención y me puse a verla y os cuento: 
Se trataba de que, un hombre galán y una mujer elegante, estaban de viaje en un barco por varios motivos, ellos vivían rodeados de lujos por sus parejas, pero 
ellos se enamoraron, ella no quería entregarse porque su marido la esperaba cuando volviera del viaje, pero a él le daba igual porque era un casanova.
Él le daba a entender que estaba enamorado de ella, y ella de él pero no quería jugársela y hablaron sobre ello.
Cuando el barco llegó a su destino, ella le dió su dirección y le dijo que si pasa lo que tenga que pasar en 6 meses, le tenía que ver a las 17:00 en el piso 102 
del Empire State; lo más cerca que podían estar del cielo; de mientras, no se podían ver.
Justo cuando ella bajaba del taxi para el encuentro, le atropellaron y quedó minusválida durante un tiempo y no pudo acudir, él le esperó hasta la media noche y ella
no aparecía, pues entonces se fue.
A partir de ahí ellos hicieron vida normal, sin saber el uno del otro.
Pasaron varias cosas, y por casualidad él por la guía telefónica, encontró el número de ella, y acudió a su casa para saber si era ella, porque tanto él como ella
eran bastante conocidos, casi famosos.
Resultó ser ella, mediante una conversación de sarcasmos e indirectas, alfinal triunfó el amor entre ellos.
Como comprendereis, en la película pasaron más cosas pero no me voy a poner a explicarla detalle por detalle, fue preciosa y conmovedora, pero la lástima es que no sé
como se llama.
Bueno, mi conclusión fue: 
Como siempre, yo me imaginé que el protagonista era él, y la protagonista yo, como todo pensamiento de enamorada hasta la médula.
El amor es muy bonito, las historias de este tipo nunca se sabe si te puede pasar a ti, la distancia es muy mala, pero siempre se puede solucionar, pase el tiempo que
pase; si el amor es verdadero, siempre triunfa.
Cuando terminó la película lloré, porque fue muy bonita, y porque yo ya empecé a emparanoiarme con mi amor, y siempre soy tan pesimista...

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